PIMEM considera un error plantear en un contexto de crisis económica el debate de la jubilación aplazada. La Federación asegura que un empresario o autónomo que se prejubila es debido a la inviabilidad de su negocio fruto de la parálisis empresarial que viven muchos sectores.

PIMEM asegura que las medidas propuestas por el Ministro Escrivá de pagar 12.000 por año por la jubilación aplazada se enmarca dentro de la falsa creencia que la jubilación “es un chollo” cuando desde la patronal se mantiene que la gente avanza su jubilación por la inviabilidad económica de su empresa o negocio.

Para la patronal “una persona que ha cotizado 30 o 40 años, habiendo cotizado al 100% y, aceptando la propuesta del Ministerio puede perder hasta un 16%, y esto puede representar una pérdida importante de dinero durante los años que le queden de vida. Jordi Mora asegura que “el fondo de la cuestión es la difícil situación económica que vivimos y que pymes y autónomos lo que necesitan es salir de la crisis para seguir cotizando y viviendo de su esfuerzo no de “ayudas paliativas” del Estado para conseguir cuadrar números”.

Mora recuerda que la realidad de las grandes corporaciones nada tiene que ver con lo que les pasa a pymes y autónomos. “Nuestro día a día pasa por el mantenimiento del puesto de trabajo, un ERTE o el despido, y todo dependiendo de como vaya la empresa no como las grandes corporaciones que tiene un colchón que amortigua la jubilación o prejubilación masiva” según Mora.

Para el presidente de la patronal “la administración necesita de manera desesperada hacer cuadrar los números porque hay menos ingresos y se sigue viviendo del famoso “baby boom”. Para Mora “la bolsa de las pensiones no se puede separar del funcionamiento real de la economía y ya hace tiempo que la administración debería haber abordado el tema y no ahora en medio de una profunda crisis económica”.